miércoles, 21 de septiembre de 2011

Comunicación masiva, más masiva que nunca

¿Cómo te encuentro en Facebook? ¿Ya viste qué status puso mi mejor amiga?, No manches que laura anda con pedro, ¿Cómo sabes? Lo vi en Facebook.   ¿Tienes blackberry? ¿Cuál es tu pin?, sígueme en twitter… ¿les suenan conocidas estas preguntas? Claro que sí, estás viviendo una “Convergencia Cultural”,  “por convergencia, quiero decir el flujo de contenido por medio de múltiples plataformas multimedia”  (Henry Jenkins, Convergence Culture).

Actualmente  estamos más comunicados que nunca, día a día se crean miles de cuentas de Facebook, twitter, blogs, etc. Estamos viviendo una era digital. Es impresionante ver como desde pequeños hay quienes saben utilizar una lap, y no cualquiera, tal vez una mac, o que acuñan como su más preciado tesoro un ipod, o apoco no han visto por la calle niños de 11 o 12 años con su Blackberry.

Pero dejando a un lado las blackberries, el uso indiscriminado por largas horas de los sitios sociales, crea, por una parte, una comunicación masiva entre amigos, conocidos, etc, pero por otra parte, ha ido desapareciendo poco a poco la interacción “Face to Face”. ¿Cuál será el futuro de tus hijos?

El elemento clave para poder hacer posible esta interacción, es el novedoso internet 2.0. Antes, un servidor editaba información y la transmitía, ahora es un proceso inverso.




Añadido por Marla Zuviri

REALITY SHOW: REALIDAD EXPLOTADA


Con el paso del tiempo las diferentes formas de comunicarnos se han expandido además de desarrollarse y complementarse unas con otras. Es así como a través de las diferentes plataformas de los medios de comunicación hoy en día podemos informarnos, comunicarnos y entretenernos alrededor del mundo, rompiendo barreras lingüísticas y culturales.
Si existen ideas que nacen en las grandes empresas de entretenimiento y estas ideas se convierten en proyectos exitosos, lo más probable es que terminen como formatos de televisión que serán vendidos como pan caliente alrededor del mundo.
Sin duda alguna en la década pasada así como en la que está empezando, uno de los formatos de entretenimiento más exitosos y vendidos son los reality shows. Es importante comprender que los reality shows no son sólo programas de televisión que buscan presentar situaciones dramáticas, humorísticas o de competencia que no estén bajo un guión, es decir no manipuladas por un director, sino también una importante plataforma de entretenimiento con muchas posibilidades de expansión.

"Los realities son, simultaneamente, el formato de televisión de moda, el objeto de crítica preferido de la sociedad actual, el mecanismo de más prodigioso para llegar a la fama de los quince minutos y el mejor invento para generar conversación pública."  (Rincón,  2006)
A pesar de que el formato de reality show existe desde 1948 con Allen Funt's hidden camera Candid Camera show (el primero show sin guion que se conoce), fue hasta la década de los 90´s donde el programa holandés Nummer 28 por primera vez puso a extraños a vivir bajo el mismo ambiente y grabó el drama alrededor de las relaciones de los desconocidos; a raíz de esto programas como The Real World y Big Brother (este último adaptado en más 70 paises) crean en la audiencia un nuevo tipo de morbo por conocer sobre la vida de los demás, siendo una ventana a la realidad y vidas de otros.



Pero es la década del 2000 cuando el reality show alcanza su mayor éxito tras programas como Survivor y el ya mencionado Big Brother. Después de esto llegaron formatos de reality shows nuevos como las competencias por ganar un premio económico, bien material o algún reconocimiento algunos ejemplos de estos programas pueden ser American Idol, América’s Next Top Model, Britain’s Got Talent, The Amazing Race, Project Runway o Fear Factor, con sus respectivas adapataciones alrededor del mundo.
Con el paso del tiempo nuevos proyectos han llegado a la pantalla chica que van desde la búsqueda de un apartamento, un día en el trabajo de un famoso pastelero, una competencia de chefs, un concurso por conocer a la pareja ideal o simplemente el grabar las 24 horas al día la vida de famosos o socialités. Las categorías de reality shows hoy en día más relevantes son: shows de citas/amor, competencia, mejora o cambio personal/material, experimento social, talk shows, cámaras escondidas, tipo documental, humorístico, supernatural, renovación y talentos artísticos.
 
Sí es cierto que a veces la realidad mostrada en los reality shows ha sido puesta en tela de juicio, también es un hecho que el reality show es “una estrategia para conectarse con las vidas de la audiencia” (Jenkins, 2006), es decir que busca crear un vínculo en el que el televidente se pueda identificar y así hacerlo más participe del programa.  Por esto hoy en día es tan común ver que los fanáticos de los reality shows forman parte de una cultura participativa que interactúa desde las discusiones en los foros de los sitios web de los programas hasta las encuestas o videochats con los protagonistas de las series, esto permite una interacción entre los protagonistas, la producción y los fans.
 Es decir, el formato del reality show le ha permitido al televidente involucrarse con la vida del protagonista ya que a pesar de que el programa muestre solo una parte de la vida de este, el televidente se puede identificar en situaciones cotidianas como el dolor, el amor, el desamor, las relaciones fraternales, la traición y el estrés del trabajo, por mencionar algunas. Por otro lado hay  situaciones que en series de televisión o películas parecen muy ajenas a nuestra realidad y con las que más que identificarnos, nos proyectamos hacia todo aquello que en la ficción se puede hacer pero en el mundo real no es tan sencillo.  
Un ejemplo claro: es más fácil vincularse emocionalmente con una adolescente que es grabada mientras sobrelleva la difícil situación de estar embarazada a corta edad, a comparación con un posible vínculo con la trama de una espía secreta "inmortal" o una súper estrella millonaria.
Aunque tal y como Jenkins menciona la cultura participativa puede ser buena o mala dependiendo su fin, por ejemplo si su objetivo es prevenir a la sociedad mostrando caso como los de Sixsteen and Pregnant de MTV de embarazos prematuros o si su fin es mostrar mundos superfluos llenos de violencia como Jersey Shore.
Es este mismo vínculo o identificación que impulsa a lo que Henry Jenkins describe como una Inteligencia Colectiva, que nos permite acelerar la forma en que el contenido multimedia, en este caso el reality show, circule ya sea de boca a boca o desde una red social a otra.
Además la expansión del reality show no solo ha llegado club de fans o a otros medios de comunicación sino hasta videojuegos, juegos de mesa, películas, dvd’s, libros, imágenes en el teléfono celular y un sinfín más de productos. Esto es un claro ejemplo de cómo la creciente demanda de realities shows ha permitido a los productores de televisión expandir sus negocios alrededor del mundo, que es una de las características que forman a la cultura de la convergencia en la que hoy vivimos.
Si quieres profundizar en la historia del reality show puedes ingresar a  http://en.wikipedia.org/wiki/Reality_television y como un gran ejemplo del avance del reality show y su desarrollo por los medios de comunicación te dejo este programa especial del fenómeno Big Brother alrededor del mundo así como los impactos que ha tenido en las diferentes culturas donde ha sido presentado el formato, vale la pena verlo. (Esta dividido en cinco partes)
http://youtu.be/zTXuIfosKc0

BIBLIOGRAFIA:

Rincón, O. Narrativas Mediáticas. Gedisa Editorial. Barcelona 2006.
Por: Héctor Ulises Castor Blanco